Barcelona es una ciudad vibrante, con una mezcla de historia, arte y modernidad. Pero lo que realmente la hace especial es su diseño que la hace perfecta para recorrerla en bicicleta. Con una extensa red de carriles bici, amplios paseos marítimos y espacios abiertos, montar en bicicleta es una de las mejores formas de explorar la ciudad. Aquí te dejamos tres rutas imperdibles para descubrir los encantos de Barcelona sobre dos ruedas.
Ruta 1: Paseo Marítimo – Desde la Barceloneta al Fórum
Comienza en la Playa de la Barceloneta, una de las playas más conocidas de la ciudad, y pedalea a lo largo del paseo marítimo hasta el Fórum. A lo largo del trayecto, disfrutarás de la brisa del mar y las vistas al horizonte azul, mientras pasas por lugares emblemáticos como el Hotel W y el Port Olímpic. Este paseo es perfecto tanto para principiantes como para ciclistas experimentados, ya que es completamente llano y se puede disfrutar sin prisa. Haz una parada en una de las terrazas junto al mar para un refresco, o simplemente disfruta del ambiente relajado.
Duración estimada: 45 minutos a 1 hora.
Dificultad: Fácil.
Ruta 2: El Barrio Gótico y la Rambla
Si lo tuyo es la historia y la cultura, esta ruta te llevará al corazón de la Barcelona medieval. Comienza en el Barrio Gótico, donde podrás perderte por las estrechas calles empedradas y admirar monumentos como la Catedral de Barcelona o la Plaça del Rei. A continuación, dirígete hacia La Rambla, la calle más famosa de la ciudad, donde el bullicio de turistas y locales crea una atmósfera única. Al final de La Rambla, te encontrarás con el Mirador de Colón, desde donde podrás disfrutar de una vista del puerto.
Duración estimada: 1 hora, con paradas.
Dificultad: Moderada (debido a la afluencia de peatones).
Ruta 3: Montjuïc y sus vistas panorámicas
Para los ciclistas más experimentados, una subida al Montjuïc es una excelente opción. Comienza tu recorrido desde la Plaza de España y dirígete hacia el Montjuïc, pasando por el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC) y el Estadio Olímpico. La subida es desafiante, pero las vistas panorámicas de la ciudad desde la cima hacen que todo el esfuerzo valga la pena. Además, puedes explorar los jardines y espacios verdes que rodean la colina.
Duración estimada: 1.5 a 2 horas, dependiendo del ritmo.
Dificultad: Alta.
Consejo: Si prefieres evitar subidas duras, alquila una bicicleta eléctrica para disfrutar de todas las rutas sin esfuerzo.